Templos
Retorno por Atenas y recuerdo
encuentros y querencias renaceres
sonrisas inquietantes
deidad precisa en mi tranquilo mundo
en que preciso vuelo mientras camino templos.
Recuento necesario en el presente
presentes recibidos
expuestos en la mesa de regalos
un cúmulo de historia
la paz en mi memoria bizantina.
Percibo ya tu acrópolis de luz
–quiero pensar en encontrarla–
y juego a jugar sin desatinos
a no extinguir incendios otoñales
en el tiempo de la tierra
y la caricia a la piedra
en ése –el de las lágrimas
que caen sin derramarse
en nuestros espacios amados–
ventanales de cristal blando
rosetones medievales
artes liberales enmarcadas por el vulgo.
Ah
planteos de culturas milenarias
renaceres de palacios
llamados sí –o así–
de –y por– obreros nobles.
La toga filosófica del vino
me descoloca como antaño
profano entonces
el ágora y el templo
vulgo al fin con la gubia
y con la letra
divulgo
al fin
parece
que me encuentro
ya
aquí.
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