Símbolos bélicos

–una utopía literaria–

Estaba la palabra hablando con la línea; bueno, más bien se encontraban en medio de una discusión acalorada, cuando el plano irrumpió en la charla y trató de calmar los ánimos. Lo único que logró fue involucrarse entre los medios.
Rectas y parábolas agredían, primero a elipse y, luego, a elipsis y sintaxis en todo tipo de polígonos y triangulaciones. Entonces apareció un nuevo elemento: el volumen.
La verdad nunca se ha sabido. El hecho es que las masas adoctrinadas por uno u otro bando enarbolaban ideas absolutas y contrarias.
El absurdo tuvo un momento de control aparente cuando descubrieron todos que portaban ropajes coloridos.
Todo lo anterior generó el medio en sí: el espacio o vacío.
Y dicha(s) oquedad(es) fue(ron) el principio del fin. La historia ya había formulado miedos en los medios.
Las “n” dimensiones planteadas por la geometría analítica presenciaron el ascenso al poder de su majestad: el número.
Parece ser que este texto ha sido el último escrito en lenguaje alfa. Todos los siguientes ya estarán en carac73r35 num3r1605.

Comentarios

  1. Cómo se puede aplaudir de pié y atronando con las palabras? Gracias por el derroche de creatividad.

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares de este blog

¿Debo disculparme?

Ojiva –planeación y resistencia

Hilos