Soneto mesoamericano


A veces se liberan verdes vientos
y vienen pregonando sus edades
los tiempos hoy no son casualidades
al verse reflejados juramentos.

Las obras que soportan los cimientos
contienen en sus muros mil verdades
vernáculas sus grietas –cavidades–
que informan de sufridos y contentos.

Son ruinas con lenguaje milenario
en tierras con la magia a flor de piel
–algunas sobreviven al corsario
lo mismo que el enjambre con su miel–
y rezan cual tlahcuilo (de su diario)
la vida en las columnas y el dintel.

Comentarios

Entradas populares de este blog

¿Debo disculparme?

Ojiva –planeación y resistencia

Hilos