Érase una vez un relato


Andaba un texto (como si fuera errante) en el mar de los encantos, las fantasías y los espíritus engañosos. Ése (el relato que una vez era) decidió por un rato hacerme compañía, y me dijo:
"Hoy veo parejas en parajes rodeados por rejas de colores cálidos. Rojas y naranjas con herrajes dorados. Entes que antes manifestaron su arrojo y valentía en torno a los calores de las contiendas.
En verdad, los verdes arbustos a veces representan miradas..."
Y se fue.
–La vida, tal cual es –como dijera ella, mi bella amiga– se conforma por las historias que uno cuenta, ¿no?


Comentarios

  1. Muy bello. No apto para extranjeros que estudien nuestro castellano. Por los juegos de palabras. Realmente encantador. Gracias

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